Homenaje de la Cámara de Representantes a Germán Abdala

Germán Abdala
Fue dirigente gremial de ATE, la Asociación Trabajadores del Estado, expresión indiscutible de un nuevo modelo de sindicalismo y Diputado Nacional.

Germán Abdala nació el 12 de febrero de 1955 en General Lavalle, Provincia de Buenos Aires, y vivió su infancia en Santa Teresita.
Allí comenzó la escuela primaria y cursó hasta segundo grado, pasando luego al Instituto Vernié, en San Clemente del Tuyú, viviendo en la costa hasta 1967”.
En 1968, ya en Capital Federal, ingresó al Colegio Secundario Manuel Belgrano cursando hasta 1972, cuando completo quinto año, pero sin recibirse pues no rindió los exámenes finales de algunas materias.
Ya por entonces, militaba en las villas de Parque Patricios y Barracas. Al mismo tiempo, se vinculó a la agrupación peronista “Amado Olmos”, enrolada en la GCT de los Argentinos (CGTA).

En 1975, ingresó como pintor en los Talleres de Minería del Estado y poco tiempo después comienza a militar sindicalmente. Por entonces, estrechó amistad con Víctor De Gennaro; y a fines de 1977 ambos lograron, con la participación de quince seccionales del interior y capital, formar ANUSATE, para combatir a la burocracia que controla en ese entonces la conducción de ATE, la Asociación de Trabajadores del Estado.
Abdala junto con De Gennaro pudieron ganar las elecciones del gremio en 1984. Y de esta forma se produjo una recuperación histórica de ATE, la primera gran victoria contra la burocracia cómplice de la dictadura militar.

Germán Abdala es elegido secretario general de ATE, seccional Capital, sin haber cumplido los 30 años. Rápidamente comprende el techo de la lucha sindical, por lo cual se lanza también a la lucha política.
En lo sindical, integró el nucleamiento conocido como “los 25 gremios combativos” junto con Telefónicos, el Sindicato del Tabaco y otros; y en lo político, el Movimiento de Unidad, Solidaridad y Organización (MUSO) junto a dirigentes de la talla de Antonio Cafiero entre otros. En esas dos tareas aplica sus fuerzas, aunque ya se halla preso del cáncer, lo cual motiva la primera operación.

Entendiendo que era necesario rescatar las banderas históricas del peronismo, traicionadas por muchos dirigentes, fundó en 1987 junto a Carlos “Chacho” Alvarez el Movimiento Renovador Peronista de la Capital Federal, dirigido a democratizar y reconstruir la dirigencia del Movimiento.
En 1988, Germán fue ratificado como secretario general de ATE seccional Capital, por otros cuatro años.
En 1989, fue electo diputado nacional por el Partido Justicialista, para el período 1989-1993. En su gestión parlamentaria, se colocó en posición crítica a la política de Menem, quien traicionó el programa electoral del “salariazo y revolución productiva”. Abdala se definió contra las privatizaciones, contra la Ley de Reforma del Estado y de Emergencia Económica. Consiguió la aprobación de la Ley de Convenciones Colectivas para los Trabajadores del Estado.
En 1990, ante el indulto del Poder Ejecutivo Nacional a los generales genocidas, constituyó el “Grupo de los Ocho”, separándose del bloque justicialista. Asimismo, renunció a los cargos partidarios y a la afiliación al Partido Justicialista.
En 1991 se abocó a la construcción del CTA (Congreso de los Trabajadores Argentinos) sosteniendo la necesidad de un nuevo modelo sindical, democrático y antiburocrático.

El 13 de junio de 1992 declaró que “el peronismo disidente y el Grupo de los Ocho han cumplido una etapa… No fuimos capaces de generar una oposición desde adentro. Quisimos ser la conducción del verdadero peronismo, pero hemos perdido. El peronismo que intentábamos expresar es ya solo un dato histórico, como puede ser cuando nos referenciamos con San Martín, Artigas, El Chacho, Yrigoyen, Evita y Perón. Hay que construir una nueva alternativa popular… Un nuevo partido o frente que rompa con el bipartidismo. ¿Cómo hacerlo? Con diversos sectores políticos y organizaciones sociales. En 1992 fue elegido por tercera vez consecutiva como secretario general de ATE Capital.
En noviembre del mismo año, se realizó el Primer Congreso del CTA en Parque Sarmiento. Debilitado por la enfermedad, Germán concurrió acompañado por su compañera Marcela Bordenave. Llevaba ya 20 operaciones, en la Argentina y en el exterior. Pero su espíritu se mantuvo erguido y rebelde. “A mí no me va a matar el cáncer, me mataría eso sí, la tristeza, si no logramos dar forma organizativa y presencia a este fervor militante.
El 6 de julio del año 2000, la sala de reuniones de la Comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados de la Nación fue designada con el nombre de Germán Abdala, a partir de una iniciativa de la por entonces diputada Marcela Bordenave, quien fue su “compañera del alma y de la vida”.
En la sesión de homenaje, la por entonces diputada y actual Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, expreso las siguientes palabras sobre Germán:
“(…) normalmente no acostumbro a rendir homenajes porque considero que a la gente se la homenajea con las conductas y con los compromisos más que con los discursos. De todas maneras, recordar a Germán Abdala en esta etapa tan particular de la vida política argentina puede ayudarnos a formular nuevas ideas y nuevos teoremas. Hay una frase de Germán Abdala que siempre me impresionó mucho. El decía que había que vivir como se piensa y actuar como se habla. Pero no sólo lo decía, sino que, lo que es más importante en política, lo hacía: era absolutamente coherente con lo que pensaba en los discursos y en la práctica. No conoció de conversiones ni de adaptaciones riesgosas. En épocas donde todo parece estar en duda, donde florecen teorías acerca de la real politique y donde debemos analizar cómo comportarnos opositores y oficialistas, creo que el mejor homenaje a Germán Abdala sería reconocer su teorema, que sostiene que hay que vivir como se habla y actuar como se piensa (…)”
TRAYECTORIA1979 - Funda junto a varios compañeros ANUSATE, Agrupación Nacional Unidad y Solidaridad de la Asociación Trabajadores del Estado. Es delegado en la Secretaría de Minería de la Nación. 1982 - Formó parte de los "25 Gremios Combativos" y fue dirigente de la agrupación "30 de Marzo", que formaba parte del MUSO, Movimiento de Unidad, Solidaridad y Organización que lideraba Antonio Cafiero. 1984 - El 6 de noviembre se produce la recuperación histórica de ATE. Es elegido secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado, seccional Capital Federal y también Congresal del Partido Justicialista (PJ) Metropolitano (Capital Federal). 1988 - Es ratificado por cuatro años más, como secretario general de ATE seccional Capital. 1989 - Es electo, a los 34 años, diputado nacional por el PJ, para el período 1989 - 1993. En esa oportunidad se produjo el primer triunfo peronista en las elecciones de Capital Federal a lo largo de la historia electoral Argentina. En su gestión como diputado fue aprobado su proyecto de ley de convenciones colectivas de trabajo para los trabajadores del Estado. 1990 - Crea junto a otros diputados el “Grupo de los Ocho”, que se opone a la política neoliberal del gobierno de Menem y al vaciamiento ideológico del voto popular del 14 de mayo de 1989. En diciembre, renuncia a los cargos partidarios y a la afiliación al Partido Justicialista por el indulto presidencial a los miembros de las Juntas Militares de la dictadura militar.
1991 - Participa en la organización y construcción de la CTA Congreso de los Trabajadores Argentinos - hoy 1998 transformada en Central de los Trabajadores Argentinos con reconocimiento legal del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación por Resolución Nº 325/9.7 1992 - Es elegido por tercera vez consecutiva secretario general de ATE Capital. El 13 de junio expresa en el diario Página 12 de Buenos Aires: “… Hay que construir una nueva alternativa popular… Un nuevo partido o frente que rompa con el bipartidismo. ¿Cómo hacerlo? Con diversos sectores sectores políticos y organizaciones sociales….". 1993 - Después de una larga enfermedad, sin dejar de luchar por un país distinto, digno de ser vivido, muere el 13 de julio. En esa oportunidad un periodista escribió: "Era uno de los últimos militantes del '70, en estado puro". Tenía 38 años, fue cremado y sus cenizas arrojadas al mar en su Santa Teresita natal.

"Todo el progreso, todo avance mientras nos tenga a nosotros como sujetos protagonistas sirve y nos hace crecer y acercarnos a esas utopías que solemos sostener los pueblos"
Germán Abdala